Del Cinismo para afrontar la vida

Del cinismo y el humor, en verdad.

Estas fiestas, creo, han sido las peores que he vivido en mi cuarto de siglo. No hay nada trágico en el asunto, sólo una descripción unilateral de la vida propia.

Vi "American Splendor" y en realidad el personaje no se parece tanto a mí (no es mi sarcasmo, ni mi humor, ni me depresión). Pero si, creo que estamos viendo la vida desde la misma montaña, solo que el brother estaba más cerca al filo. Yo ya no, hace un toque me aleje porque las alturas hacen daño (sobre todo con eso de caer y la insoportable levedad de no se qué y la fucking shit).

En realidad me identifico más con la mancha de "Invasiones Bárbaras". Es como tener ganas de ver y saber y conocer y experimentar porque se sabe (o se cree) que más allá no hay nada. Y que el mundo capitalista me lo pague.

Bueno y eso, que estas fiestas no me han dicho nada aún. Quizá en el camino llega a tener un significado real, sea lo que sea lo que eso signifique.

El blogger que conocí

Este debería ser un post largo, pero más que nada, debió ser temprano. Como aún estoy en la chamba (puaj!) esto será corto y tardío.

Solo quiero agradecer a Paco Bardales (Diarios de IQT) por haber coincidido el lunes pasado en la Feria del Libro de Miraflores. Por haber hablado de esa galaxia misteriosa que es la selva, por haberme provocado las ganas de visitar esas tierras lejanas con su comida extraña y su gente cálida y calurosa. El video fue de una edición maravillosa, me saludas al director.

Nada más, luego trataré de ampliar mi alegría.

Juicio a Fujimori

Cada vez que leo y releo los comentarios que apoyan a Fujimori como "el salvador del Perú" me vienen demasiadas preguntas a la cabeza. Muchas de ellas nunca encontrarán una única respuesta y posiblemente se respondan con justificaciones (inexactas) pero... ¿es que así estamos construidos los peruanos, y más exactamente los limeños?

A este nivel de mi vida yo he llegado a pensar que lo más importante en esta vida es ser consecuente, por muy equivocado que se esté. Es por esto que de las fujimoristas la más intragable me parecía Carmen Lozada y la más humilde y sincera Luz Salgado. Martha Hildebrandt solo quería asegurarse su jubilación, por mucho que respete su trabajo como lingüista.

Ahora ¿cuanta consecuencia se les puede pedir a estas personas que apoyan a uno de los gobiernos más corrputos de nuestra triste vida republicana? En el Perú que sufre todos los males, ¿vale la pena pedir que se hagan cosas buenas de manera correcta? ¿Para AF fue sido demasiado difícil no dar un golpe de estado, no ignorar las denuncias a Montesinos, no postular a un tercer mandato presidencial? ¿Es justo que estas obvias faltas de ética y moral dividan a una población que debería concentrarse en progresar?

Yo creí pensando que AF era la voz, cuando llegó el año 2000 pensé que los excesos justificaban el trabajo realizado, cuando lo vi renunciar pensé que era un cobarde demasiado grande y decía que el Perú tiene los gobernantes que se merece. Hoy en día cuando veo a una persona llorando a su madre/hermano/hijo muerto por un error del ejército ya no creo que nos merezcamos eso.

¿Y que nos merecemos entonces?

Fácil los tres meses de vacaciones que se piden esos conchasumadres del Congreso.

Las flores negras del dolor

Cuando el mundo se pone oscuro,
se pone denso,
todo mal...

Yo por el mundo no me dejo desanimar.

Al menos esta no perdió su significado sobrina.

La vida exagerada

Me despierto. Me lamento de tener que chambear. Me doy un duchazo. Si hay tiempo y dejé una pela en el dvd la noche anterior la pongo a ver. Si hay tiempo y dejé un juego pendiente en el PS2 le doy curso. Me visto. Me voy a la cocina, saludo a mi abuela. Desayuno, si hay que desayunar. Si se me hizo tarde voy en taxi al trabajo. Si es temprano tomo combi. Luego colectivo. Llego a la chamba, hago la finta de enseñar el fotocheck que perdí hace unos meses en un colectivo, y entro. Si no hago eso tendría que registrarme con las lindas recepcionistas y me haría gastar tiempo y explicaciones. No me gusta eso. Llego a mi sitio o, si llegué muy temprano y no desayune en casa, voy donde "Luchito" a comprar el rico desayuno. Voy a mi sitio y me logueo a la PC. Si dejé el firefox abierto el día anterior es muy probable que mi PC esté lentejaza y tenga que matar el proceso (mejoren eso pues). Atiendo y atiendo correos del tipo "Pf hacer X" y del tipo "La cagué haciendo esto, pf arréglalo". Es un decir. Llegan las 12:30 PM y le digo a Yep y a "La Media" para ir a almorzar. Bajamos y nos quedamos un aproximado de 90 minutos. Si hubiera sido cumpleaños de alguien serían de 120 a 180 minutos, sin asco ni remordimiento. En ese lapso (abajo) llegan distintos compañeros y amigos, armamos pampa, nos reimos un poco y chacoteamos de todo lo que nos llega. Regresamos por la "ruta larga" al puesto y me vuelvo a loguear. Utilizo los siguientes 10 minutos para la higiene personal y regreso: me vuelvo a loguear al PC. Siempre que la uso pongo el winamp con mi música personal, que hace mucho no varía y me tiene por las bolas, pero peor es nada. Mientras sigo atendiendo correos y evitando el contacto con mi pseudo-jefe platico y maleteo a "la media", bromeo y rajo con Miguelo, enseño y divierto a Yep, maltrato sin piedad a uno que otro co-worker. Es lo justo, repito incesante. Es lo justo. A mi hora de salida (sean 5, 6 o 7 PM) me paro y me voy. No suelo tomar taxi para irme, no da para tanto el sueldo. Así que tomo couster, camino y otra couster. Por eso no me gusta vivir donde vivo. Quiero carro, a pesar de que Lima sea una caca para manejar. Sobre todo porque creo que si tuviera carro pasaría por el cine antes de ir a casa y daría rienda suelta a mis gustos, pero fácil es mentira. Luego llegando a casa paso por la bodega del "broder" que me cae bien y suelo comprar lo siguiente por separado o combinaciones de distintas cantidades: Sublime, Piqueo Snacks, Leche Gloria Azul en lata, o en caja, o chocolata en caja, pan, huevos, gaseosa, Cifrut, Tampico, Gatorade, Charadas, Chips Ahoy, Hot Dog o alguna otra cosa para matar el hambre y el organismo. Llego a casa y depósito todo menos algunas golosinas en la cocina. Caliento mi plato de comida (si hay), y me voy a mi cuarto mientras o juego PS2 o veo TV o veo Series o veo una pela o enciendo la laptop o combino cualquiera de esas actividades. Y así hasta que me da sueño. Y usualmente me da sueño aproximadamente pasada la 1 AM. Últimamente también mis actividades nocturnas incluyen los SMS con Regina, aunque no es diario. Y últimamente siento que me estoy convirtiendo en una gelatina. Es el aburrimiento y la falta de emoción. Lo sé. O quizá no sé nada.

No me aumentaron el sueldo por tu ausencia
Sin embargo
La lata de Nescafé me dura el doble
El triple las hojas de afeitar
Antonio Cisneros